Bañar a tu gato muy seguido puede estar causándoles graves problemas de salud en la piel.
Los gatos son animales que, por naturaleza, mantienen su higiene personal mediante el acicalamiento regular, utilizando su lengua para limpiar su pelaje y eliminar la suciedad. Este comportamiento innato generalmente reduce la necesidad de baños frecuentes por parte de sus propietarios. De hecho, bañar a los gatos en exceso puede ser contraproducente, ya que podría eliminar los aceites naturales de su piel, provocando resequedad y afectando negativamente la salud de su pelaje.

La frecuencia con la que se debe bañar a un gato depende de varios factores, incluyendo el tipo de pelaje, el estilo de vida y la salud del animal. Por ejemplo, los gatos de pelo largo o aquellos que pasan tiempo al aire libre pueden requerir baños más frecuentes debido a la acumulación de suciedad o enredos en su pelaje. Sin embargo, incluso en estos casos, no se recomienda bañar al gato más de una vez al mes, a menos que sea absolutamente necesario.
Los aceites naturales presentes en la piel de los gatos desempeñan un papel crucial en el mantenimiento de la salud y el brillo de su pelaje. Estos aceites están compuestos principalmente por lípidos, incluyendo ácidos grasos y ceramidas, que forman una barrera protectora contra agentes externos y ayudan a retener la humedad en la piel. Esta barrera lipídica es esencial para prevenir la sequedad, la irritación y las infecciones cutáneas.
Es importante destacar que la producción y composición de estos aceites pueden variar según factores como la dieta, la genética y el entorno del gato. Por ejemplo, una alimentación equilibrada y rica en ácidos grasos esenciales contribuye a una piel más saludable y a una producción óptima de aceites naturales. Además, el estrés y las condiciones ambientales extremas pueden afectar la calidad y cantidad de estos aceites, impactando en la salud general de la piel y el pelaje del felino.
Para mantener la integridad de los aceites naturales en la piel de los gatos, se recomienda evitar baños frecuentes e innecesarios. En su lugar, es preferible realizar un cepillado regular, que ayuda a distribuir uniformemente estos aceites por todo el pelaje, eliminando la suciedad y los pelos muertos sin alterar la barrera lipídica natural. Esta práctica no solo mantiene el pelaje limpio y brillante, sino que también promueve una piel saludable y reduce el riesgo de problemas dermatológicos.
Para la mayoría de los gatos domésticos que viven en interiores y tienen un pelaje corto, un baño cada tres o cuatro meses suele ser suficiente. Es importante observar el estado del pelaje y la piel del gato; si se nota suciedad, grasa excesiva o mal olor que no se resuelve con el acicalamiento natural o el cepillado regular, podría ser el momento de considerar un baño.
Es fundamental observar el comportamiento y la salud de la piel de nuestro gato para determinar la necesidad de un baño. Si el gato presenta suciedad que no puede eliminar por sí mismo, infestaciones de parásitos o condiciones médicas que requieran baños terapéuticos, es aconsejable proceder con el baño siguiendo las indicaciones de un veterinario. En ausencia de estas circunstancias, el baño frecuente no es necesario y puede ser perjudicial.
Un caso real fue los baños que se le hicieron a un gato llamado Morocho que Vive en Lima Perú, sus dueños lo bañaban muy a menudo en verano pensando que el gato tenia calor y esto comenzó primero a poner al gato muy cansado y al principio parecía estar relajado pero notaron que adelgazo y tenia cansancio ya que no quería comer como antes. Su piel también comenzó ponerse mas rosada y en algunas zonas del cuerpo como las patas traseras comenzó a caerse un poco el pelo ya que el shampo podía haber quedado atrapados en esos pequeños lugares.

Un estudio titulado «Bañar a un gato: cuándo, cómo y con qué frecuencia»
El estudio científico de la Veterinaria San Juan, realizado por profesionales de la Clínica Veterinaria San Juan, aborda las prácticas recomendadas para el baño de los gatos. El estudio destaca que la frecuencia del baño depende de factores como el tipo de pelo, el estilo de vida y la salud del gato. Además, se enfatiza la importancia de consultar con un veterinario para determinar la frecuencia adecuada del baño, ya que un baño excesivo puede eliminar los aceites naturales de la piel y el pelaje, lo que podría afectar la salud del gato.
Referencias:
- EnPucol. (2023). Consejos de cuidado de la piel para mantener a tu gato Sphynx saludable. Recuperado de EnPucol
- ExpertoAnimal. (2023). Aceite de oliva para los gatos – Beneficios, propiedades y dosis. Recuperado de expertoanimal.com

Autor
Hola soy Gerardo Emmanuel Pereyra, Ambientalista y activista por el planeta estudie diseño y artes. Pero me apasiona la idea de crear un mundo más sostenible y eco amigable tengo la gran misión y proyecto de plantar un millón de arboles, y estoy orgullo que ustedes la comunidad de este proyecto Green Planet me estén acompañando para logarlo!